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Por Luis Rojas Marcos.
A Paco Marín Camacho, un buen hombre de Cieza y un excelente socialista. In memoriam
Los otros días, que diría Antonio Segado, es decir, antes de ayer, charlando con mi amigo Enrique Navarro, por el derrotero que nos llevó la conversación, me confesó que hubo un tiempo en el que pensó crear un Partido Político que, si bien el nombre sonaba a cachondeo cuando lo oías por primera vez y si tenías, estimado lector, la madurez suficiente (más de 65 años) muy pronto, no solo entendías el porqué, también aceptabas el término “Anarcocebolleta”.
Las raíces profundas de la educación en la infancia y la adolescencia de Enrique pertenecen a Albacete. Bebe de la misma fuente que Raúl Cimas, Joaquín Reyes et al., y por supuesto le acompaña un coeficiente de inteligencia émulo al de la pandilla de cómicos manchegos. No en balde Cervantes eligió a su manchego e ingenioso hidalgo por aquellas tierras. Tampoco don Quijote es mal coche. Si bien, tanto el personaje cervantino como mi amigo Enrique son fijos dalgo, no obstante la cabeza de este último está mejor amueblada.
En esa época mi admirado paisano Paco Marín tejía toda una infraestructura para llegar y conducir a “Los Panteras Grises” europeos a una Federación. No iba desencaminado. En los días 30 y 31 de marzo de 1.992 fue protagonista en la ciudad de Estrasburgo de la ponencia del Parlamento Europeo de los Mayores, invitado expresamente por el Grupo Socialista del Órgano Legislativo Comunitario. Estaban intentando crear un nuevo Parlamento Europeo de los Mayores.
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Lo que no sabía Enrique era que ese invento funcionó con fuerza en Europa allá por los años 90. Posiblemente, sin saberlo estaba en esa cresta de la ola.
Imagina, sapientísimo lector, el follaero en las obsoletas estructuras de los partidos políticos, si democráticamente, se las comieran crudas los militantes o Mayores de Europa Unidos por una Federación internacional. Son cutres, no tontos. Lo de Parlamento Europeo de los Mayores era un torpedo a la línea de flotación del sistema político actual, controlado por personas ajenas a los negocios ancestrales de todos los países europeos.
Aquello duró lo que dura un cubito de hielo en un whisky on the rock.
PD/ Si Paco no hubiera padecido una cardiopatía desde la infancia, debido a las condiciones durísimas que padeció desde muy niño trabajando en el campo, a lo mejor la política mediocre que padecemos, no tendría lugar. Estimado lector, Paco se murió muy cerca de llevar a cabo esa Fundación Europea. Cagontó.